Un saludo amigos.
Hoy 12 de mayo de 2022, no he salido en moto a ningún sitio. No he conducido, ni por carreteras, ni por la gran ciudad. No me siento un buen biker.
Como tengo una moto, ya denominada vieja en Barcelona, no tengo derecho a andar con ella por la Ciudad Condal, hasta las 08:00 de la noche. Pero ¿merece la pena ir en transporte público? Hoy sí, porque hoy es la "FIESTA POR LA CARA", una fiesta que ESPACIO HARLEY, hace con motivo de la derogación de la ley, que nos obligaba a llevar mascarilla, una celebración porque por fin podemos vernos las caras.
El significado de la "fiesta", creo que todos entendemos qué es, no solo por la mascarilla en sí, si no por ver alejarse una historia de locura, enfermedad, y confusión, para la gran mayoría, y de desgracia para otros. Parece que el hecho de separarnos de esa mascarilla, nos aleja un poco más de lo que hemos vivido durante un largo tiempo, y como dice Jorge del Olmo, poder volver a ver nuestras sonrisas de nuevo, que al fin y al cabo, es lo que nos da la vida.
Vamos a lo que vamos. Hoy queremos relataros un poco, cómo ha ido la "FIESTA POR LA CARA", que ha tenido lugar en "ESPACIO HARLEY", concesionario oficial de HARLEY DAVIDSON en Barcelona.
Si os resumiera toda la tarde, de una forma muy rápida, y en una palabra, sería, COJONUDA. Pero como no es cuestión de eso, porque supongo que os gustaría saber algunos detalles, voy a ello.
Para quien no conocéis el lugar, os diré que, ESPACIO HARLEY, es un concesionario oficial HARLEY DAVIDSON, que se compone de ESPACIO HARLEY, tienda, taller, 99% MOTO BAR RESTAURANTE, y ESPACIO TATTOO. El artífice de todo este tinglao es Jorge Del Olmo, pero la parte gastronómica está a cargo de Jordi Bou, y del arte en la piel en manos de Albert Grau. Entre todo se forma ESPACIO HARLEY, y por este motivo, cada vez que hay un evento todos dan el do de pecho, como hemos podido comprobar hoy.
Al llegar, estaba la cosa poco animada. Son las 18:00 aprox, es normal que no haya mucha gente, dado que es jueves, día laboral.Voy recorriendo el gran párking para motos que hay desde la acera hasta la entrada del concesionario, y con la mirada busco a Jorge, para saludarlo. Lo veo dentro de la tienda, y pienso que si está currando no debo de molestarlo, eso me lleva también a pensar en entrar a hacer una birra de tiempo en el 99% MOTO BAR, y decidir mi próximo paso.
Entro, me pido una birra, y Kiko, gran amigo, se presta a invitarme. Hace tiempo que no nos vemos, nos abrazamos, saludamos, y se nos antoja una larga charla sobre cómo van nuestras vidas. Cuando llevamos ya un rato poniéndonos al día y arreglando el país, me excuso y voy en busca de Jorge del Olmo, charlo con él un rato sobre nuestras movidas (que a vosotros qué os importan cotillas), y vuelvo a echar un ojo a la tienda ya que hace tiempo que no vengo. Han puesto una zona de tattoos. Es lo que le faltaba a este lugar, ya está completo, aunque seguro que a Jorge se le acaba ocurriendo algo para mejorarlo si cabe.
Salgo a la puerta, me reuno con Kiko de nuevo. Pero decidimos volver a entrar, y ponernos en una cola que hay, hacia una especie de mini barra de bar. La verdad es que estuvimos en ella más tiempo de lo que nos hubiera gustado, ya que estaba hasta la bola de gente, pero salían de ella muy felices, y decidimos llegar hasta el final, donde descubrimos, que las sonrisas eran, por unos cócteles singulares para la ocasión, con los que tuvieron a bien obsequiar a los presentes. No obstante, una vez saciada nuestra curiosidad, nos alejamos del lugar en cuestión con dos birras y sendos chupitos de Jack Daniels.
Volvemos a salir a la calle, y montamos nuestro campamento base en frente de la puerta, donde también está la puerta del 99% MOTO BAR. Allí, nos encontramos con algún colega, charlamos un poco, vienen unos colegas a saludar a Kiko, la cosa es complicada, pero el caso es que nos conocemos también. A partir de aquí, yo me voy escapando a hacer fotos, a ver qué va ocurriendo, y volviendo a la base.
No paro de encontrarme amigos, colegas, conocidos, etc, sin dejar en paz la cámara, sin parar de charlar con unos y otros, y de pasarlo en grande.
En un momento dado, que Jordi Tuñin, de Rock FM, está pinchando en el 99% MOTO BAR, haciendo un karaoke de lo más rockero dentro del bar, a través de la pared de vidrio que los une, veo una pequeña fila de personas dentro de la tienda. La razón es que hay un sorteo en plan ruleta de la suerte, al más puro estilo Harley Davidson, En muy pocos minutos, la cola creció de una forma increíble, pero la dirección de ESPACIO HARLEY, procuró que todos los presentes se fueran contentos. Regalaron productos de la mítica marca, vales regalo para las distintas instalaciones, tienda, tattoos, bar, e incluso entradas para la conocida concentración Supermatycustom.
Con todo esto, y con el buen ánimo, tanto de trabajadores, como de clientes, pasamos una tarde superior, sobre todo al ir llegando amigos y compañeros de correrías, tanto recientes, como antiguas.
Al evento han acudido muchísimos motoristas, el parking está lleno de vehículos, SPORTSTERS, SOFTAILS, ELECTRAS, y cualquier modelo de HARLEY DAVIDSON que te imagines, en la acera también hay un buen montón de ellas, vemos varios miembros de motoclubs, HOG, HDC, BANDIDOS, JOKERS, IMPERIALES, etc., hay gente comiendo dentro del bar, la terraza a tope, la tienda llena, está claro que ESPACIO HARLEY se ha ganado un gran nombre, y por algo será, hay gente de todo tipo y estatus social, las voces de júbilo te rodean allí donde estés. Sin duda ha sido todo un éxito. Entre las impresionantes motocicletas aparcadas, a última hora, destacan, una Sanglas 400, y una NSU, señal de la no discriminación de la marca.
Allí están, el hombre más fuerte del mundo (Antuan), Pepe "El Carnicero", Albert Balaguer, Olaf Pla, Javi Kawa, Josemi, Jose María Roque, Freddy, Willy, Charlie, David, y seguro que alguno más que me dejó en el tintero, en una mesa de la terraza del bar. Kiko y yo nos unimos a ellos, entre risas y buen rollo vamos viendo cómo van desapareciendo motos y pilotos, dando por concluido el día. Me doy cuenta que me van a cerrar el tranvía, que me quedo en tierra, y entre insultos al consistorio y juramentos, me despido, voy hacia mi medio de transporte y finiquito el día.
Solo deciros que en breve tendréis un reportaje sobre ESPACIO HARLEY para poder conocerlo un poco a fondo. Estoy seguro que flipareis con su forma de ver y de vivir el mundo de las dos ruedas.
Saludos en V amigos.
